PRIMER RUGIDO

Siguen los actos de corrupción que afectan a los trabajadores de la empresa Fertinal, y es que en la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje, donde también imperan los actos de delincuencia organizada, el influyentismo se ofrecen al mejor postor a cambio de unas “dadivas”. Es triste ver cómo cualquier ciudadano interesado en solucionar un problema se ve frenado por las mismas autoridades, quienes sin recato ejercen la ley con viejas costumbres, la cual en la mayoría de los casos, por no decir siempre, terminan beneficiando al que la paga.
Prueba de ello es lo que se ha estado registrando en Michoacán, donde la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje está vendiendo la justicia a patrones, olvidándose de los pobres trabajadores, quienes se ven en desventaja al lado de importantes empresarios, los cuales utilizan sus influencias, inclusive, presumen de su amistad con el gobernador Lázaro Cárdenas Batel, quien no se ha desligado de nexos con el dueño de Fertinal.
En términos jurídicos, lo que ocurre en Fertinal es considerado un fraude que beneficia a su propietario, Fabio Massimo Covarrubias Piffer, pero para la Junta Federal es un asunto con derecho y llama la atención que en este estilo de asuntos se dañe a cientos de familias mexicanas con el apoyo de las autoridades, las cuales demuestran ignorancia e incompetencia con su proceder.
Llama la atención cómo se ha puesto en forma de mártir al grupo Fertinal de Fabio, pero en Michoacán la gente se muere de hambre por el desempleo, más sin en cambio la corrupción ha llegado a niveles altos en este asunto. Ejemplos, están los de Miguel Ángel Gutiérrez Cantú, presidente de dicha dependencia, así como Alejandro Pérez y la licenciada de apellido Chavero, quienes fungen y fingen como presidentes y auxiliar de la Junta Especial número 15, los cuales dañan a los trabajadores sin remordimientos, a cambio de fuertes sumas de dinero.
Sin embargo, la corrupción más grande en todo esto, está en Lázaro Cárdenas Batel, quien insiste en poner oídos sordos y ojos ciegos en un asunto el cual sólo ha sido para beneficiar al famoso empresario Covarrubias, porque se dice que espera de él el apoyo en las próximas elecciones del estado.
Pero bueno, si las autoridades no sirven para nada y se venden al mejor postor, entonces, el gober no debe molestarse por la delincuencia ni por los movimientos sociales, los cuales han dejado saldos rojos. La pregunta es ¿Felipe Calderón escucha al pueblo? o su frase de señalar al corrupto no es aplicable a las autoridades, empresarios y millonarios de este gran país que todos los días ve como la corrupción sigue imperando, y la procuración de justicia pasa a segundo termino, como sucede en Michoacán, estado gobernado por el PRD, quien parece tiene sus días contados como gobierno.

LA GARRA DEL LEON

Una grave ruptura cimbra la joven Federación Democrática de Sindicatos de Servidores Públicos (FEDESSP), cuya creación ni siquiera le costó trabajo a Elba Esther Gordillo, presidenta del SNTE y real dirigente de esa organización de burócratas. Resulta que Ignacio Castillo, dirigente del Sindicato Nacional de Trabajadores de la SAGARPA, rompió con la dirigencia formal, que no real, de la FEDESSP encabezada por Humberto Dávila Esquivel y Joel López Mayrén, grises personajes ambos, y les comunicó a todos los sindicatos que tienen hasta el día 17 del presente para desalojar la sede ubicada en Antonio Caso, colonia San Rafael.
El sindicato de SAGARPA es el dueño de ese antiguo inmueble, y su dirigencia está ilocalizable aprovechando su periodo vacacional; los sindicatos afiliados a la FEDESSP comenzaron a penar sin saber qué hacer. La noticia los agarró de sorpresa. El fondo del problema es que la poderosa maestra Elba Esther desairó al ingeniero Castillo, dirigente caciquil del rico sindicato de la SAGARPA, al no incluirlo en su lista de candidatos plurinominales que hoy integran la actual legislatura federal, sumado a la falta de liderazgo, cerrazón, apatía y desinterés de Humberto Dávila Esquivel desde que fue impuesto al frente de la FEDESSP.
El diputado Joel Ayala, presidente de la FSTSE, organización de la que huyeron más de 20 sindicatos para formar la FEDESSP, está de plácemes, pues sin meter las manos ni invertir dinero cobra afrentas mientras sus adversarios dentro de la burocracia se despedazan. Y de Elba Esther Gordillo, la eterna dirigente de los maestros en México, ni sus luces. No habría nada mejor que sacarla de la dirigencia, y que en verdad se elija a alguien que esté comprometido con la educación de los mexicanos, porque a Elba le es más productivo barbearle al Presidente en turno, que velar por los sindicalizados profesores, que cada día son más pobres.