lunes, 15 de diciembre de 2008

PRIMER RUGIDO

Si el jefe de gobierno de la ciudad de México, Marcelo Ebrard Casaubón no quiere que se le aplique el lema que reza: “el pez por su propia boca muere”, debe poner atención en la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal, porque le “están metiendo gol” y lo pueden dejar en ridículo sus subordinados de la PGJDF. Siguen los abusos de comandantes y agentes judiciales que hacen de las suyas sin que nadie les ponga un alto. Pero lo peor puede venir dentro de poco tiempo, porque la Dirección General del Estado Mayor de la Policía Judicial se encuentra en manos de Mario Alberto Izazola Álvarez, quien cuenta con denuncias penales y en la Comisión de Derechos Humanos, por delitos como robo, lesiones, privación ilegal de la libertad y amenazas de muerte, abusos que cometió cuando fungía como Gerente de Seguridad Institucional del Sistema de Transporte Colectivo Metro y donde su “dedo chiquito” y ejecutor de sus abusos era Roberto González Roldán.
Durante el paso de Izazola Álvarez en el “gusano naranja”, se incrementaron los asaltos a los usuarios, además creció la prostitución y la venta de enervantes. Con los negros antecedentes de este servidor público ¿Qué confianza podrá tener la población a los judiciales? Ninguna, porque no tiene la calidad moral para poder denunciar abusos de los “judilocos” y si éstos se enteran que de acuerdo al organigrama de la PGJDF el segundo del jefe general de la Policía Judicial, Jesús Jiménez Granados tiene denuncias penales levantadas por usuarios del Metro, así como de vagoneros, pues se les hará fácil operar de la misma forma que Izazola: bajo la impunidad.
Miguel Ángel Mancera, Procurador General de Justicia del Distrito Federal, deberá intervenir en este caso si no quiere que se “pudran” más elementos judiciales al tener en la Dirección General del Estado Mayor de la Policía Judicial a una persona que abusa del poder. Lo inmediato deberá ser pedirle la renuncia a Izazola y someterlo a una exhaustiva investigación, y es que hay quienes aseguran que detrás de este mal funcionario existen cosas turbias que lo podrían enviar a prisión.
En caso de que lo sigan dejando al frente del Estado Mayor de la Policía Judicial, pues entonces Mancera y Jiménez Granados deberá pagar las consecuencias de los actos de este personaje, que asegura estar bien “parado” dentro del PRD ¿Será?
Los capitalinos no tienen la culpa que la cúpula del perredismo en el Distrito Federal se encargue de proteger a gente incapaz y abusiva en los cargos que desempeñan. Al contrario, la obligación de las autoridades que deben procurar y administrar justicia, es entender que son los habitantes de la ciudad de México quienes les pagan sus quincenas, por lo que automáticamente se convierten en sus verdaderos jefes. Esto parece no le importa a los malos servidores públicos, porque desde siempre han cambiado la aplicación de la justicia por millones de pesos.
Mientras, el ciudadano, aquel que vive con el salario mínimo, debe seguir siendo víctima de los abusos y la prepotencia de gente sin escrúpulos que han “prostituido” las leyes y la venden al mejor postor. Si en verdad en la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal quieren acabar con la corrupción, entonces deben investigar bien a sus funcionarios, y entonces encontrarán más gente como Mario Alberto Izazola Álvarez que vive del abuso de autoridad y la venta de la justicia.

RUGIDO DEL LEON

En este abuso bien se podría aplicar la ya célebre frase que utilizará Nelson Vargas en el caso de las investigaciones del secuestro de su hija Silvia Vargas Escalera (q.e.p.d): “No tienen madre” y es que le queda como anillo al dedo a los diputados federales que se “autorizaron” recibir cada uno de los 500 como aguinaldo la nada despreciable cantidad de 105,800 pesos. La tranza fue buena, 101,000 pesos de aguinaldo y 4,872 pesos para su canasta navideña.
¿Verdad que no tienen madre? Recibieron 40 días de aguinaldo y una lana para su canasta navideña, sin importarles que en miles de hogares la “canasta navideña” solamente para la cena del 24 de diciembre traerá puros huevos, si acaso, porque en otros tortillas con sal y chile. Esa debería ser la “dieta” de los representantes populares, ellos comen con manteca y en lujosos restaurantes a cargo del erario público, porque el pago de la cuenta no sale de sus tarjetas de crédito o de sus carteras, sale de los impuestos de todos los mexicanos, y luego se quejan de porque no los quieren en sus distritos, pues como si desde que llegan, ya sea a la diputación local, federal o al Senado, lo primero que hacen es encargar caros y camionetas último modelo.
Durante más de dos años andan a bordo de esas lujosas unidades, pero cuando necesitan nuevamente del voto de la gente, la dejan en el garage y andan a “golpe de calcetín” buscando convencer a la población de que vuelvan a votar por ellos porque ya se acercan las nuevas elecciones y como se aplica desde hace varios años: “vivir fuera del presupuesto, es vivir en el error”; se dan baños de pueblo y ya cuando de nueva cuenta tienen otro “hueso” se olvidan de quienes los apoyaron. Eso es lo de siempre, pero no hacen nada porque a la clase obrera, que gana el sueldo mínimo se le incremente. Se atreven a apoyar a los patrones y olvidar al pueblo.
Quienes en días pasados, o en los próximos reciban su aguinaldo, no pasará de los 500 pesos en miles de casos. Entonces, el que los diputados hayan obtenido 105,800 pesos no se puede traducir en otra palabra, más que en un insulto a la clase trabajadora, a la que en verdad con su dedicación y trabajo está sacando adelante al país. A ellos hay que hacerles un monumento, y no a los políticos que a lo largo de su “carrera” no han hecho otra cosa más que calentar curules y sillones de oficinas de gobierno o dependencias, tanto federales como estatales.
Otro de los engaños a la población, es que se les dijo que de su aguinaldo a los diputados federales se les descontaría por concepto de impuesto 38,899 ¿Dónde está el engaño? Pues en que por un acuerdo ese dinero se les retribuyó en diversas formas de acuerdo a cada una de las bancadas. A los del PRD se les reintegrará en su fondo de ahorro; los del PRI y Acción Nacional, los depósitos por compensación de ese impuesto fueron discrecionales en tiempo y en cantidad, y se les depositó en sus abultadas cuentas bancarias.
Este fue un buen mes para los diputados federales porque recibieron de dieta parlamentaria 77,888, más 74,558 pesos para sus módulos de Atención Ciudadana y Asistencia Legislativa; de aguinaldo (con descuento) 62,765 pesos, y 4,872 pesos para su “canasta navideña”. Entonces sumando la” lanota” que se embolsaron, cada uno de los 500 legisladores recibió más de 200,000 pesos.

LA GARRA DEL LEON

No entienden los priístas en Puebla, no les basta con tener dentro de sus filas al “Gober Precioso”, Mario Marín y, es que luego del escándalo desatado por el animador Leonardo Julián Hidalgo, quien en presencia de Juan Martín Barrientos Ramos, presidente municipal de Hueytlalpan ofreció dinero a niños indígenas a cambio de quitarse la ropa, ahora defienden al edil. En días pasados en el Congreso local la bancada del Revolucionario Institucional se opuso a que se denunciar ante la PGR el lamentable hecho y el presumible acto de corrupción de menores, que no es otra cosa más que el abuso a la necesidad. Como era de esperarse los panistas calificaron la negativa del PRI como un mal antecedente que se suma a los abusos de Marín, que en su momento fue acusado de pederastia por la periodista Lidya Cacho y que encolerizó al también denunciado abusador de niños, Kamel Nacif “El Rey de la Mezclilla” dentro del libro “Los Demonios del Edén”.
Lo bueno de esto, es que ya cayó en manos de la justicia Leonardo Julián Hidalgo, a quien se le inició la averiguación previa 842/2008/Zacatlán por el delito de corrupción de menores y ultraje a la moral; que bien, pero y el edil Barrientos Ramos ¿Qué? También se le debe dar un castigo, porque hay versiones de que estuvo sentado en su lugar observando como se abusaba de la necesidad de unos pequeños que fueron incitados a desnudarse por 50 pesos.
Quien le está sacando también al “parche” de enjuiciar al presidente municipal de Hueytlalpan, es el titular de la Procuraduría poblana, Rodolfo Igor Archundia, toda vez que en días pasados calló sobre si hay alguna responsabilidad del edil Juan Martín Barrientos Ramos, por lo que la gente se pregunta si traerá “línea” por parte del “Gober Precioso” para no enviar a prisión a su compañero de partido. De nadie es desconocido como se protegen los políticos en México para evitar la acción de la justicia. Barrientos desde el principio negó haber estado presente durante el bochornoso acto, pero hay personas que aseguran que siempre estuvo en su lugar.
Cuando le echaron el guante a Leonardo, este afirmó que su detención era “injusta”; más injusto fue que abusará de la necesidad de unos pequeños, pero parece ser que el dinero que le dio a los menores los tendrá que pagar con más de 12 años de prisión, al ser considerado delito grave la corrupción de menores.